Autoconocimiento

“El autoconocimiento es la llave a tu libertad”

A LO LARGO DE NUESTRA EXISTENCIA, hemos creído que nos conocemos, y sin embargo sentimientos de rencor, sufrimiento, angustia y falta de paz nos han envuelto en algún momento de nuestras vidas.

Acaso, si nos conociéramos realmente, ¿podría existir algo que nos quite la paz?

Cuando he visitado templos, y conocido personas que proyectan una gran paz, algo ha llamado mi atención: y es el hecho de que simplifican su vida de forma magistral. Viven sin apegos a las personas, cosas materiales, o a su cuerpo físico. Es como si su estado de paz lo alcanzaran al estar presentes en cada momento, haciendo solo aquello que corresponde a cada instante.

Tal es el caso como cuando se disponen a comer; hacen uso de todos sus sentidos físicos, percibiendo por ejemplo, el olor de la comida por medio de su sentido del olfato, mientras que saborean sus alimentos con el sentido del gusto, y así sucesivamente.

También he conocido personas que cuando llega el momento de meditar o hacer oración, pareciera como si detuviesen el tiempo, mientras se conectan con planos más elevados de consciencia. Su cuerpo deja de ser lo más importante para entonces, expandirse y experimentar solo paz y quietud.

¿Cuándo fue la última vez que recuerdas haber disfrutado de tus alimentos, de la compañía de alguien o una caminata, sin estar tu mente en otro lugar? En ocasiones, comemos apresurados porque nuestra mente está en aquellos asuntos pendientes que queremos hacer, y no en el momento presente.

Pasan los días, semanas, meses y quizás hasta años, en los que funcionamos en automático; viviendo cada instante perdidos en el mundo de las ilusiones. En mi vida, he podido ser testigo de que, cuando me dejo llevar por lo que creo que es importante, me enfrento a una serie de eventos que me causan inquietud. Sin embargo, cuando recuerdo quién soy en realidad y vivo cada instante más presente, todos mis asuntos fluyen en armonía.

¿Cuál es la diferencia? Bueno, para mí la diferencia radica en recordar que soy un Ser infinito, que es capaz de vivir cada instante en un tiempo sin tiempo, tan solo en el aquí y ahora.

Es justo en ése momento, que surge el desapego y mi aparente necesidad de resultados específicos. Simplemente, todo se desenvuelve de una manera tan natural que en la mayoría de los casos es mejor de lo que hubiese esperado.

En el proceso del auto conocimiento, lo que surge de la mente, son una serie de creencias de lo que se supone que somos. Vemos un cuerpo físico frente al espejo y creemos que somos el cuerpo, recordamos nuestro nombre y nos identificamos con él; o bien, nos identificamos con nuestros sentimientos, emociones, recuerdos, experiencias e historias de los demás, que en ocasiones las hacemos nuestras cuando en realidad no lo son.

“Un día a la vez, una cosa a la vez”.

Al poner en práctica el disfrutar de cada momento soltando los pensamientos que se proyectan ya sea al pasado o al futuro, nos estamos regalando el aprender a vivir con mayor plenitud.

Liliana Ruiz